Este viernes, en el KK Women’s and Children’s Hospital de Singapur, Santino Rzesniowiecki —el niño misionero de 7 años— recibió su primer trasplante de médula ósea en el marco de un tratamiento innovador y personalizado. La intervención se concretó gracias a la donación de células madre de su papá, Erik, quien se convirtió en su primer donante compatible.
La operación forma parte de un protocolo en dos etapas diseñado especialmente para su cuadro médico. En las próximas semanas, Santino será sometido a un segundo trasplante, esta vez con células madre provenientes de un cordón umbilical donado por una mujer canadiense a través de un banco internacional.
Desde Singapur, su mamá, Natalia Rodríguez, compartió con emoción el momento vivido: “Se despertó con todo el hambre, con todas las ganas de nuevo, pero está tranquilo. Súper bien todo”, relató. “Ahora a confiar que va a seguir así, que todavía falta un largo camino. La etapa más difícil va a ser a partir de la segunda semana. Este es un comienzo”.
El caso de Santino representa un enorme desafío médico. El protocolo al que fue sometido permite realizar el trasplante aún cuando la enfermedad no se encuentra en remisión completa. De hecho, el último aspirado medular previo al trasplante detectó apenas un 2% de células malignas, lo que habilitó el avance del procedimiento.
“El estar acá, que Santi haya llegado a su primer trasplante, es un montón”, expresó Natalia. “Después de tantos malos pronósticos… no por sus médicos de Buenos Aires, sino por otros de distintas partes del país y del mundo. Así que, nada, felices”.
Santino fue paciente del Hospital de Pediatría de Posadas y del Hospital Gutiérrez de Buenos Aires, donde se sometió a dos trasplantes anteriores que no lograron frenar la enfermedad. Luego de descartar una alternativa en España, la familia fue aceptada en Singapur, en un centro de alta complejidad con experiencia en casos como el suyo.
Un tratamiento costoso y una red de solidaridad
El tratamiento no solo representa una esperanza médica, sino también un enorme esfuerzo económico. La colecta solidaria iniciada en Argentina permitió cubrir los primeros gastos, pero el presupuesto ya superó los 500 mil dólares estimados inicialmente, y aún se necesita recaudar más para continuar con el proceso.
Las donaciones pueden realizarse a través del alias amorporsantino.arg (a nombre de su padre, Erico Oscar Rzesniowiecki) o mediante plataformas como Paypal, Twitch y Prex para quienes deseen colaborar desde el exterior.
El camino de Santino todavía es largo, pero este primer trasplante marca un avance crucial. Cada día suma una nueva dosis de esperanza, y cada gesto solidario ayuda a sostener el sueño de su recuperación.
Con información de El Territorio