El Juzgado de Instrucción N.º 6 de Posadas resolvió archivar la causa penal iniciada de oficio por la muerte de Juanita Sirimarco Díaz, la estudiante de 13 años que falleció el 12 de octubre de 2024 tras regresar de un viaje de egresados a Villa Carlos Paz. La resolución fue firmada por el juez Ricardo Walter Balor, quien concluyó que no se configuró delito alguno por parte de los adultos responsables del grupo.
Juanita había participado junto a sus compañeros del Instituto Cristiano República Argentina (ICRA) del tradicional viaje de fin de primaria a la provincia de Córdoba. Durante el trayecto de regreso, la adolescente comenzó a sentirse mal y llegó descompuesta a Posadas, donde fue trasladada de urgencia al Hospital Pediátrico Fernando Barreyro. Pese a los esfuerzos médicos, falleció horas más tarde.
El juez Balor basó su decisión en el análisis de múltiples declaraciones testimoniales recolectadas durante la investigación. Compañeros de curso, docentes, coordinadores, una madre acompañante que es enfermera, y personal médico brindaron su versión de los hechos. El expediente también detalla que no fue posible realizar una autopsia porque el cuerpo fue cremado, lo que limitó la posibilidad de establecer una causa precisa de muerte.
Aun así, los estudios médicos realizados en vida determinaron que Juanita había contraído Influenza B, cuadro que derivó en un shock séptico de evolución rápida. Según concluyó el magistrado, esta condición podría haber sido letal incluso con atención médica inmediata.
El juez remarcó que tanto docentes como coordinadores actuaron con el nivel de responsabilidad exigible en una situación de emergencia. “No se advierte una relación causal entre una conducta específica y el desenlace, tratándose de una infección de evolución rápida cuya gravedad excedía la capacidad de previsión de los responsables”, expresó Balor en su fallo.
En particular, citó el testimonio de una madre acompañante —profesional de la salud—, quien afirmó no haber notado una situación crítica durante el viaje. “Si yo hubiera visto peligro, le hubiera dicho a la maestra que pare”, declaró.
La resolución también analiza la elección de la madre de Juanita de solicitar una ambulancia para el traslado al hospital, en lugar de aceptar el vehículo ofrecido por la empresa de turismo, lo que, según se detalla, pudo haber generado una demora en la atención.
Frente a la posibilidad de imputar omisión de auxilio o negligencia, el juez fue enfático al descartarlas. “Docentes y coordinadores brindaron asistencia en forma oportuna, utilizando los recursos disponibles y actuando dentro de un contexto limitante”, señaló.
Aunque la causa penal quedó archivada al no hallarse indicios de delito, la familia Sirimarco Díaz conserva la posibilidad de avanzar por la vía civil, en caso de que considere que existieron responsabilidades que puedan ser reclamadas por esa instancia.