Recolectores de residuos en riesgo por vidrios mal descartados en Eldorado

Un grave acto de irre­spon­s­abil­i­dad veci­nal en el Kilómetro 4 puso en peli­gro a recolec­tores de resid­u­os, quienes hal­laron vidrios rotos den­tro de una bol­sa común sin pro­tec­ción ni adver­ten­cia.

Un pre­ocu­pante acto de irre­spon­s­abil­i­dad veci­nal fue repor­ta­do en la noche del jueves en el sec­tor del Kilómetro 4 de Eldo­ra­do, donde recolec­tores de resid­u­os se encon­traron en serio ries­go al manip­u­lar la basura. Según se pudo con­statar, vidrios rotos fueron arro­ja­dos den­tro de una bol­sa de poli­etileno común, sin ningún tipo de pro­tec­ción ni adver­ten­cia.

El inci­dente se reg­istró durante el turno noc­turno, mien­tras el per­son­al real­iz­a­ba su recor­ri­do habit­u­al. Al lev­an­tar una bol­sa de basura domi­cil­iaria prove­niente del ces­to de una vivien­da, los tra­ba­jadores detec­taron la pres­en­cia de los frag­men­tos de vidrio, que podían haber traspasa­do fácil­mente la del­ga­da bol­sa, provo­can­do cortes y heri­das graves.

“Esto es una clara evi­den­cia de la fal­ta de con­cien­cia sobre la seguri­dad de quienes tra­ba­jan recolectan­do nue­stros resid­u­os”, expre­saron des­de el sec­tor de recolec­ción, hacien­do hin­capié en la necesi­dad de respon­s­abil­i­dad por parte de los veci­nos.

La cor­rec­ta dis­posi­ción de obje­tos pun­zantes y cor­tantes es un aspec­to fun­da­men­tal del mane­jo de resid­u­os. Este tipo de dese­chos —como vidrios, jeringas o latas abier­tas— deben colo­carse den­tro de cajas de cartón rígi­das, botel­las plás­ti­cas o envas­es resistentes, y señalizarse con una adver­ten­cia vis­i­ble para evi­tar acci­dentes.

Este suce­so sirve como una urgente lla­ma­da de aten­ción a la comu­nidad: la fal­ta de cuida­do en la sep­a­ración y descarte de resid­u­os peli­grosos pone en ries­go la salud e inte­gri­dad de los recolec­tores, quienes diari­a­mente tra­ba­jan para man­ten­er la limpieza y el orden en la ciu­dad.

Des­de el área de recolec­ción reit­er­aron a los veci­nos la impor­tan­cia de envolver y pro­te­ger ade­cuada­mente todos los mate­ri­ales cor­tantes antes de deposi­tar­los para su retiro.