La Asamblea Permanente de Productores de la Zona Centro de Misiones redactó una carta dirigida al Papa Francisco, con el objetivo de visibilizar la crítica situación que atraviesa el sector yerbatero tras la desregulación del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), dispuesta por el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 del Gobierno nacional.
El documento fue entregado este martes 15 de abril al obispo de Oberá, Damián Santiago Bitar, quien confirmó que lo elevará al Vaticano a través de la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires. “Recibí a los productores esta mañana y llevaré su mensaje al Santo Padre”, expresó el obispo.
En el escrito, los productores expresan que acuden al Papa “con la esperanza de que escuche nuestro reclamo, sabiendo de su sensibilidad hacia los sectores más humildes y su amor por el mate”, y describen la grave situación que atraviesan las más de 13.000 familias productoras de yerba mate en la provincia.
“Desde hace semanas estamos en lucha, acampando y movilizándonos en distintos puntos, como el Cruce Karaben de Oberá, para visibilizar una situación que se ha vuelto insostenible”, explican los firmantes, entre quienes se encuentran Salvador Torres (MAM), Hugo Sand (Apam), Ana Goldemberg, Karina Gural, y el propio obispo Bitar.
La carta cuestiona que, tras la pérdida de facultades del INYM, las grandes industrias “imponen precios que ni siquiera cubren los costos de producción”, pagando 300 pesos por kilo de hoja verde a plazos de hasta 150 días, cuando los productores reclaman 505 pesos. “El precio del paquete en góndola sigue aumentando, pero esta baja no beneficia al consumidor, sino solo a los intermediarios más poderosos”, advierten.
Además, señalan que la situación “pone en riesgo la continuidad del trabajo en las chacras” y podría agravar el éxodo rural. “No pedimos subsidios ni privilegios, solo poder vivir con dignidad de nuestro trabajo. Queremos permanecer en nuestras tierras, cuidar el monte, el agua y la biodiversidad de Misiones”, sostienen.
El documento finaliza con un pedido concreto al Sumo Pontífice:
“Rece por nosotros, visibilice nuestra causa y, si lo considera posible, haga llegar nuestro mensaje a quienes tienen el poder de cambiar esta realidad”.
Los productores reclaman, además, la recuperación plena de las funciones del INYM bajo la Ley Yerbatera N° 25.564, sancionada en 2002, y advierten que la lucha actual remite a los mismos reclamos que movilizaron al sector hace más de dos décadas.
Con información de El Territorio